“Te regalo un chocolate”: testimonio juvenil #YoSoyPaz
Como parte de las actividades juveniles del Movimiento #YoSoyPaz, la iniciativa ciudadana nacida en Baja California que ha alzado la voz para exigir resultados a sus gobernantes en materia de paz y justicia, se llevó a cabo una actividad navideña el 20 de diciembre en uno de los principales centros comerciales de la ciudad de Ensenada.
El sector juvenil del movimiento se dio cita en Macroplaza del Mar, donde llevaron chocolates etiquetados con mensajes sobre el sentido real de las celebraciones decembrinas, con el fin de regalarlos a las personas que se encontraban comprando, recordándoles la importancia de la familia, la paz y la armonía como principales tesoros que deben apreciarse más que un regalo que desajuste la economía del hogar.
La experiencia fue enriquecedora para los jóvenes participantes, quienes se sorprendieron al ser rechazados por algunas personas que sintieron desconfianza al obtener un chocolate de manera gratuita.
Rescato este hecho porque resulta doloroso que nuestra sociedad se encuentre tan profundamente herida, que no pueda apreciar un detalle de este estilo. Nuestra experiencia nos indica que nadie da nada gratis, que todo es para sacar ventaja, que los demás intentan hacernos daño y debemos mantenernos a la defensiva y alertas.
Desde luego, hay ciertos miedos naturales que nos permiten evitar peligros. Sin embargo, hemos atravesado tantas situaciones difíciles como sociedad, que más allá de los miedos naturales, hemos adoptado una actitud de desaliento, de desesperanza.
Regalar un chocolate fue un gesto simbólico, fue el pretexto para lograr transmitir un mensaje de solidaridad y amor. Ojalá que cuando la vida se acerque a nosotros para regalarnos un chocolate o un mensaje de este estilo –hablando en sentido figurado–, estemos abiertos, dejando de lado tantos prejuicios y malas experiencias que nos marcan y no nos permiten abrir los brazos a intenciones de paz.
En estos días estaremos escribiendo una serie de propósitos para el año 2018, un libro en blanco con 365 maravillosas oportunidades. Lamentablemente, nuestra actitud ha sido mermada por el ambiente que nos rodea. Que los mexicanos seamos capaces de cumplir nuestras metas para volvernos personas más felices no depende sólo de nosotros: se requiere un compromiso social asumido para mejorar las condiciones de vida de todos.
Recibir un chocolate con un mensaje de paz y armonía por parte de la vida sólo será posible si existen las condiciones dignas para alimentarnos de él. Por ello, resulta de suma importancia que los ciudadanos nos cuidemos entre nosotros, exijamos soluciones reales y llevemos a cabo acciones de solidaridad, que nos recuerden nuestra esencia y humanidad.
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