Cierres propinarán duro golpe a miles de negocios

El cierre de las actividades económicas “no esenciales” decretado por los gobiernos de la Ciudad de México y el Estado de México, con el respaldo del gobierno federal, a partir de este sábado 19 de diciembre, representa un duro golpe para pequeño comercio y las empresas familiares, que esperaban tener un repunte de sus ventas en esta temporada decembrina y de Año Nuevo.

La aplicación del semáforo “rojo” es el peor escenario al que volvemos los mexicanos de la Zona Metropolitana, luego de 9 meses de estar implementando el gobierno una serie de estrategias que no han tenido los resultados esperados para contener los contagios y las muertes ocasionadas por el COVID-19, advirtió el Consejo Nacional para el Desarrollo del Comercio en Pequeño (ConComercioPequeño, AC).

La organización consideró incomprensible el que las autoridades impongan el cierre de negocios formales «no esenciales», cuando la gran mayoría de ellos acataron todas y cada una de las medidas implementadas en los protocolos que las propias autoridades diseñaron: tapetes sanitizantes en los accesos, uso de cubrebocas obligatorio para trabajadores y clientes, aplicación de gel antibacterial, señalizaciones de entradas y salidas, reducción en el aforo de la clientela al 30 por ciento, inversión en fumigación y sanitización de los locales, reducción de los horarios de servicios e incluso inversión en campañas para evitar contagios, así como la implementación del código QR para detectar contagios.

Cuestionó la sobrerregulación a los sectores que siempre han estado en la disposición de atender las medidas de prevención, mientras que otra parte se descuidó al comercio ambulante, tianguis y comercio informal, así como bares y cantinas.

Advirtió sobre la magnitud del golpe económico que esta medida provocará, pues implicará el cierre de alrededor del 80 por ciento de la actividad económica, obligando el cierre de cerca de 375 mil negocios en la Ciudad de México y poco más de 560 mil en el Estado de México, es decir, un total de 935 mil empresas cerradas en la Zona Metropolitana.

La organizaciòn ConComercioPequeño, AC calcula que las pérdidas económicas por ventas no realizadas ascenderán a poco más de los 80 mil millones de pesos, pues el cierre implica la cancelación de actividades mercantiles planeadas en torno al 24 y 31 de diciembre, así como en torno al 6 de enero, todas ellas, fechas de alta actividad mercantil.

Anticipó que los giros que se verán afectados, son: restaurantes con servicio en el local, hoteles, tiendas de ropa, zapaterías, negocios de belleza (salones de belleza, estéticas, peluquerías, spa’s y arreglo de uñas), accesorios para autos, mueblerías, electrodomésticos, perfumerías, venta de telefonía celular y artículos electrónicos, joyerías, pinturas y materiales para arreglo de casas y, por supuesto, venta de artículos navideños (árboles naturales y artificiales, esferas, adornos, etc.), así como juguetes que en esta temporada tienen gran demanda.
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